Una hernia umbilical es una protuberancia en la zona del ombligo. Se produce cuando algunos órganos abdominales pasan a través del músculo del abdomen, generalmente a través del orificio umbilical.
Esto puede provocar dolor en la zona del ombligo, así como una protuberancia. Si la hernia es grande, puede ser palpable y a veces visible. Las hernias umbilicales son más comunes en niños, pero también pueden ocurrir en adultos.
Las causas principales de una hernia umbilical son:
Congénita: Esta es la forma más común de hernia umbilical. Se produce cuando el anillo umbilical no se cierra correctamente después del nacimiento.
Obesidad: La obesidad aumenta la presión abdominal, lo que aumenta el riesgo de desarrollar una hernia umbilical.
Lesión abdominal: Una lesión abdominal intensa puede debilitar los músculos abdominales y aumentar el riesgo de desarrollar una hernia umbilical.
Toser o estornudar con fuerza: Esto puede aumentar la presión abdominal y desencadenar una hernia umbilical.
¿Cómo identificar una hernia umbilical? Estos son unos de los síntomas más frecuentes por los que debes buscar atención oportuna:
- Protuberancia o bulto en el ombligo
- Dolor o molestia en el área del ombligo.
- Hinchazón y enrojecimiento alrededor del ombligo.
- Dolor que empeora con la tos, el estreñimiento o el esfuerzo.
- Náuseas, vómitos o malestar estomacal.
- Fiebre, si hay infección.
- Problemas para orinar.
El tratamiento para una hernia umbilical depende de la edad y severidad de la hernia. Si la hernia es pequeña y los síntomas son leves, el tratamiento puede ser simplemente el seguimiento cercano con el médico. Esto implicará monitorear los síntomas y posibles complicaciones.
Si los síntomas son graves o la hernia no desaparece por sí sola, se puede recomendar una cirugía para repararla. Esta cirugía implica el uso de una malla para sostener la hernia y cerrar la abertura. La cirugía generalmente es segura y eficaz.
Si un hernia umbilical no se trata, puede provocar complicaciones graves. El tejido escapado a través de la abertura en la pared abdominal puede quedar atrapado y no volver a su lugar, causando dolor, inflamación e incluso necrosis del tejido. También puede aumentar el riesgo de infección, por lo tanto, es importante que un hernia umbilical se trate tan pronto como sea posible.